Aunque sabemos que es mejor empezar de pequeños que de mayores, acostumbrar a tu hijo a dormir en una habitación diferente siempre puede ser complicado. Cuando son pequeños, lo mejor es que los padres y el bebé duerman en la misma habitación para facilitar las tomas nocturnas, y se recomienda que el bebé duerma contigo durante los primeros seis meses por motivos de seguridad. Pero pasado ese tiempo, puede empezar un lento proceso de introducción a su nueva habitación. Puede hacerse antes o después, pero los estudios demuestran que cuanto más tarde, más difícil le resultará al bebé acostumbrarse a un nuevo entorno para dormir.
Dicho esto, es decisión de cada padre trasladar a su bebé a una habitación separada para dormir. Los primeros meses pasan volando y queremos tener a nuestros bebés el mayor tiempo posible. Pero si estás pensando que ha llegado el momento de probar una nueva rutina a la hora de dormir, aquí tienes algunos datos de Bebés Victoria que debes tener en cuenta:
Un lugar familiar
Asegúrate de que tu bebé reconoce el lugar en el que va a dormir. Haz que juegue y se relaje en su nuevo dormitorio para que se acostumbre a las diferentes imágenes, sonidos y olores del lugar.
Acostúmbrale poco a poco
Prueba a utilizar su nueva habitación para una siesta diurna antes de probar la rutina de acostarse. Cuanto más tiempo pasen relajándose y descansando en su nueva habitación con mamá y papá, mejor.
Evita la mudanza durante la dentición
Trata de evitar hacer esta transición con tu hijo cuando esté enfermo o esté pasando por un periodo difícil de dentición. Si tu bebé está mal, lo más probable es que duerma inquieto y necesite tener a mamá y papá cerca para consolarse. Espera a que se le pase el malestar y, si es necesario, no dudes en repetir el proceso de familiarización. No hay que precipitarse.
Sentido del olfato
Dejar algo con el olor de mamá en la cuna del bebé puede ayudar a reconfortarle cuando se está acostumbrando a dormir sin ti. Una camiseta de mamá, o su mantita, después de un rato contra el cuerpo de mamá en la cuna con ellos, puede tranquilizar al bebé y hacerle saber que estás cerca.
Del moisés a la cuna
Si vas a pasar a tu bebé del moisés a la cuna, prueba primero a ponerlo en la cuna de tu habitación. Luego, cuando se haya acostumbrado a la nueva y espaciosa cuna, puedes trasladarla a su nueva habitación y empezar allí el proceso de transición. De este modo, se enfrentará a los cambios de uno en uno.